lunes, 5 de abril de 2010

Homenaje a un gran dramaturgo...



Jorge Díaz Gutiérrez nació el 20 de febrero de 1930 en Rosario, Argentina, de padres inmigrantes españoles. A los 4 años de edad su familia se trasladó a Chile. Estuvo en el Colegio de curas de San Miguel y luego en el San Pedro Nolasco, donde obtuvo buenas calificaciones. Posteriormente estudió y ejerció la arquitectura en la Universidad Católica de donde egresó en 1955.En 1959 conoció a algunos de los integrantes del Grupo Teatral Ictus y empezó a trabajar con ellos, a partir de ese momento, su carrera de arquitecto quedó en el olvido.
En un primer momento, se desempeñó como escenógrafo, para luego hacerlo como dramaturgo, labor que le haría ser reconocido como uno de los más influyentes de la escena teatral nacional de la segunda mitad del siglo XX. Posteriormente se convirtió en uno de los directores de la compañía.Estrenó siete obras con este grupo antes de emigrar a España. Con sus obras "Un Hombre llamado Isla" y "El Cepillo de Dientes", despertó el interés de la crítica.
Con más de noventa obras teatrales escritas, entre las que destacan El cepillo de dientes, El velero en la botella, Las cicatrices de la memoria, Topografía de un desnudo y Pablo Neruda viene volando- y alrededor de cuarenta piezas de teatro para niños, a lo que se agrega su trabajo como guionista de radio y televisión, y sus creaciones de narrativa, Jorge Díaz es uno de los dramaturgos más premiados en la historia del teatro chileno.
En 1964 se radicó en Madrid, España, en donde permaneció por espacio de 30 años, alcanzando gran éxito en dicho país y Europa. Venía a Chile fugazmente, nunca por más de una semana al año, a ver a su madre, y a sus tres hermanos mayores.
Entre los galardones que obtuvo se cuentan el Premio Nacional de las Artes de la Comunicación y Audiovisuales (1993); el Premio Antonio Buero Vallejo de Guadalajara (1992); el Premio de Teatro Centenario de la Caja de Ahorros de Badajoz (1989); el 2° Premio en el Cuarto Concurso de Dramaturgia Eugenio Dittborn, otorgado por la Escuela de Teatro de la Universidad Católica (1987) y el Premio Palencia de Teatro de España) (1980).
El lunes 12 de Marzo de 2007 fallece a la edad de 77 años, víctima de un cáncer al esófago.
En una de sus últimas apariciones públicas Jorge Díaz entregó a la audiencia un discurso cargado de ironía donde habló directamente a sus compañeros dramaturgos sobre el quehacer en las artes escénicas:
Dramaturgo querido,
patético amanuense de los diálogos
pareces siempre tan errático, innecesario y prescindible
,pero sin ti nos faltaría a todos
una expresión de lo humano,
una visión del mundo, una poética,
una imagen del hombre, que a pesar de sus yerros
resultará profética algún día."

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